domingo, 15 de agosto de 2010

Y seguimos contando....

Si hay mucho para decir…. es bastante dificil empezar, sobre todo cuando hay tanto para contar y uno intenta no aburrir. Pero en fin, hoy es 15 de agosto del año 2010, simplemente un dia mas. Para mi hermano yuto del alma, el señor Tiburcio Begue, y para mi se cumplen hoy 3 años desde que nos fuimos de la Pacha Mama. Que nos fuimos, a que nos fuimos…?..yo creo que para ese entonces no lo sabiamos y hoy en dia tengo momentos en los que solo se que viajar era necesario. Por que amerita escribir sobre este dia? Simple, porque todo sigue y todo va cambiando, y asi no has sucedido a nosotros. La busqueda de ese “algo” que todo el mundo tanto habla, la verdad no tengo ni idea pero todo se va dando solo y cuando uno menos se da cuenta se notan cambios. Junto con esos cambios, la sensacion de que el tiempo y las distancias son solo relativas, es mas y mas fuerte. Testigo numero uno: hace un año que no veo a mi hermano, pero siempre que hablo con el se me levanta el Corazon, y acusemenme de cursi, pero no hay distancias con mi yuto hermano. Como se explica esto? Justo ahora estoy en un bondi camino a El Salvador, y vaya a saber en que anda el Tibu del otro lado del charco, no siento que estas palabras contengan la mayor dosis de inspiracion pero si de sentimientos…asi que mi hermanito…………… FELIZ ANIVERSARIO YUTO!!!!




En realidad son mas que 3 años..... PD: no tengo pa corregir los errores y tengo fiaca

domingo, 4 de julio de 2010

Un mes y un par de días

Eso es exactamente lo que pasó desde la última vez que le dedique unos momento a este espacio en el que tantos recuerdos reposan. Sinceramente, y no es por ponerle presión, pensé que el ahora viajante chico de gira (Cabezón Arrigo) se iba a poner las pilas, pero bue, no podemos pedirle demasiado, es un chico de mente dispersa.
Subo un par de fotos de mis primeros días de Junio. Días en los que tuve la posibilidad de trabajar en Chicago y disfrutar mucho de aquella maravillosa ciudad. Gratamente sorprendido, tuve la posibilidad de recorrerla, no mucho, pero pasearla al fin.
Espero que disfruten las fotos tanto como yo, en Caralibro (Facebook) tengo más.

Abrazos,
Tibu


miércoles, 21 de abril de 2010

Hijo abandonador.

Ese soy yo, ausente en los momentos importantes. Pero me hago cargo, lo único que estoy haciendo es lo que ambos me han inculcado. Así que no lloren si no he estado en los dos festejos, tuvieron la mala suerte de que les haya salido muy bueno.

Hoy, señoras y señores, mi señora madre, aquella que tantas alas me ha dado y que siempre ha abogado por mi libertad, cumple medio siglo. Si si, dicho de esta manera parece un montón...y lo es. Pero para mi mamá no, una eterna pendex de la vida. Nadadora, ciclista, pintora, artista, madre, mujer, hermana, hija y, de tanto en tanto, una muy buena amiga. Andrea nació hace exactamente cincuenta años y esta noche en Bariloche se arma; yo por mi parte brindaré en su honor más de una vez.

Feliz Cumpleaños Mamá...en un ratitin te llamo.

Tibu

lunes, 22 de marzo de 2010

La emoción hecha música.

La música posee, a mi parecer, una capacidad inherente de transportarte y empujarte hacia estados de ánimos muy diversos. Cada uno de nosotros la vive de maneras diferentes, desde uno u otro lado, tanto desde atrás de escenas o como yo, un simple oyente.
Siempre una gran parte de los músicos han despertado en mi una profunda admiración. Te guste o no su música, no se puede negar que el proceso creativo de componer canciones se merece respeto.
En el dos mil cinco, y mientras arrancaba en el mundo de la publicidad de la mano de la COFRADIA, la música sonaba a todo poder en nuestra pequeña oficina. Allí fue que, junto a Jose "Cuchu" Seco, Santiago Olagaray y Gastón Levy, además de aprender a ser publicista, conocí una banda uruguaya llamada No Te Va Gustar. Los acordes sonaban lo más alto que podía y nosotros le cantábamos a Clara. Un himno de amor y esperanza hecho rock por aquellos músicos del otro lado del río.
Esa banda calo profundo en mi gusto musical, me volví un poco fanático de la misma e hice esfuerzos por que todos mis amigos lo fuesen, entre ellos el gran Eduardo Horacio Marchini, Director Ejecutivo de Grupo Exit. A los años, como queriendo demostrarme que no estaba equivocado, volvieron a generar lo mismo con otra canción y de esa manera entraron para siempre en mi pequeño stand de grandes bandas.
Hoy lo quiero compartir con ustedes, desde mi punto de vista, son dos himnos que siempre llevo en mi...

Clara



De nada sirve

miércoles, 17 de marzo de 2010

Algo de montaña.

Siempre hace bien al espíritu indomable y viajero de quien suscribe unos días alejados de la gran ciudad, mezclándose con aquellos que han sabido hacer del escarpado terreno su día a día. El Tibu se escapó y, refugiándose en la morada del Peter en Benasque, disfruto de tres increíbles días en las nevadas laderas adyacentes al pico Cerler. No voy a mentir si les digo que no me arrepentí un poquitín de haber hecho de Barcelona mi morada, pero decisiones son decisiones y hay que ponerle el pechio (sic) a las balas.
He vuelto a la diaria de la condal, al aroma de smog pero la playita cerca. Es que el paraíso no existe, el Shing y el Shang dominan nuestras vidas. Pero si existiese yo ya lo encontré. Dicen que aveces te tenés que ir muy lejos para darte cuenta de que lo que estabas buscando lo tenías ahí al lado.
Yo ya se donde está mi paraíso, vos? Usted? Ustedes? Vosotros?

Tibu...

pd: me puse a jugar con el photoshop y le arme esta foto al Peter, gusta?

lunes, 1 de marzo de 2010

Chile


Para quien aun no lo conozca es uno de mis compañeros de piso. En realidad el único, las otras son mujeres. Se llama Cristobal y, como yo, es sudamericano de pura cepa. Nacido en Los Angeles Chilenos, ha pasado unos días muy malos últimamente. Sin recibir durante unas angustiosas horas noticias de su flia, por fin gracias a dios a últimas horas del Sábado se supo que estaban todos bien.
Desde acá mi humilde recuerdo y buenas energías para todo Chile.

Abrazos
Tibu, el chico que sigue de gira.

martes, 16 de febrero de 2010

Motivational Speaker "bis"

Tengo una amiga muy chiquitita, de cuerpo pero no de espíritu, que un día rompió un frasco y se dió cuenta que el aire "enfrascado" no estaba tan bueno. Entonces asomando la cabeza empezó a ver un mundo nuevo. Ahora le han entrado así como muchas ganas de saltar del frasco y empezar a moverse un poco más por la alacena. Ella dice que desde este humilde espacio le hemos dado un empujón, yo creo que es una condición innata escrita en su ADN.
Así como nosotros (Jorge Luis Arrigo y quien suscribe, Tiburcio Begue), intentando no perder el cariño local y demases, montamos este humilde espacio de anécdotas y opiniones; ella ha hecho de las suyas y también se ha suscrito a la idea de tener una "bitacora" de experiencias.
Se llama yotesoysola.blogspot.com y será un cúmulo de alegrías y buenas vibras que despide esa pequeña personita.
Desde nuestro rincón le enviamos las mejores ondas para la aventura que está a punto de emprender. Y como bien sabe decir ella: "un mundonauta reconoce a otro al instante, tienen un brillito especial en los ojos que refleja todo lo que vivieron..." Así que estén atentos mis amigos, quizás algún día se la encuentren en el camino.

Tibu, mochila extrañan mochila

pd: de regalo les dejo una foto que saqué en San Sebastián (Donosti) el fin de semana pasado. Se llama "EL peine del viento" y está en el límite occidental de la playa de la concha.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Big Fish




- ¡Narcisos!
- Son tus flores favoritas.
- ¿Cómo has podido encontrar tantas?
- He llamado a todas las floristerías de cinco estados, les dije que era la única manera de que mi esposa se casara conmigo.
- ¡Ni siquiera me conoces!
- Tengo el resto de mi vida para conocerte.


Edward Bloom (Big Fish)


Una de las mejores películas que he visto. Nudo en la garganta cada vez que termina.

martes, 26 de enero de 2010

Km 84, una aventura andina.

Afuera llueve, tanto que parece que el techo está pronto a caerse encima nuestro; adentro, mi cabeza enamorada y una almohada promiscua aprovechan sus últimos momentos antes que la mañana las pesque infraganti.
Desde el otro lado de la puerta que acaban de golpear, una voz femenina dice: “Chicos, que se les va el tren.”...silencio...ninguno de nosotros atinó a dar señales de vida. Justo cuando la puerta iba a sonar nuevamente, mi cerebro hizo el click, “no te preocupes, nos tomamos el de las 10...” Todos sabíamos que esa era una gran mentira, pero servía de consuelo para seguir soñando.
Valle cerrado, río caudaloso, lluvia incesante y tren que se va, el cocktail perfecto para un buen thriller de terror, un pseudo Hostel pero sudamericanizado. En ese momento, mientras mi cabeza y la almohada volvían a su idílico romance, en una parte de mí emergió una irracional claustrofobia, no tan irracional si se piensa en el thriller y los condimentos del mencionado cocktail. Claustrofobia que fue acallada inmediatamente por un sueño que se apoderaba de todo y de todos.
Rebeldones como nos veíamos en ese momento, nos rehusábamos a pagar un ticket de ida y vuelta cuando sólo tomaríamos un tramo; era la manera que tenía la empresa ferroviaria de contrarrestar las perdidas que el camino del inca le generaba. Una auténtica estafa que no estábamos dispuestos a promover. “De ultima, un día más de caminata no mata a nadie...” repetíamos constantemente intentando justificar nuestras intenciones.
Como queriendo burlarse de nosotros, la lluvia ceso brevemente en cuanto nos dispusimos a caminar, pero insisto: brevemente. No sabíamos ni para donde teníamos que encarar, teníamos todo el día, o por lo menos eso creíamos. Fue una sola pregunta, pero el aldeano nos miró como si fuésemos la inquisición ¿A dónde va el tren? “hacia allí, hay que remontar el río” no dijo continuando con su faena y sin siquiera mirarnos a los ojos.
Mochilas al hombro y andar enérgico; silencio stampa y mente perdida; pasos y más pasos. Fueron varias horas rodeados de un paraíso andino que sólo se ve en documentales. De tanto en tanto saltábamos de las vías para esquivar el tren de turno. Refugiarnos de la lluvia era inútil, es como si al estar tan altos las gotas no lleguen a desarmarse y allí sean más gordas que en cualquier otro sitio.
Como aquel segundero que de tanto mirarlo a veces va en sentido contrario, los carteles indicadores del kilometraje de la vía se hacían rogar y religiosamente cada dos kilómetros festejábamos su presencia. Saltando, abrazándonos y realizando el tan ansiado traspaso de mochila (es que con mi compañero habíamos tomado la sabia decisión de juntar pertenencias y ahorrarnos una carga innecesaria en la espalda de quien se viese beneficiado por el turno en cuestión).
De cartel en cartel la mañana fue pasando, brevísima merienda de por medio; así también la tarde. En todo ese tiempo los senderos brillaron por su ausencia y cuando aparecían, nuestras cansadas rodillas y castigados tobillos lloraban de la emoción. Es que verán: de los muchos kilómetros que caminamos, muy pocos de ellos habían sido beneficiados con otro camino que no fuesen las duras y rocosas vías del tren. Empujados a avanzar todo el tiempo, varias fueron las ocasiones en que no dimos buen pie o no del todo bien, doblándonos o forzando una posición poco conocida en la memoria de nuestro cuerpo.
El destino dejó de ser lo importante y, a pesar de todo, el camino fue lo que más disfrutamos. Encontrarnos en medio de Los Andes, a principios del siglo XXI y aislados de todo, era como una aventura soñada y que continuaba a pesar de los tres días de caminata que precedieron a aquella jornada por las vías; jornada llena contratiempos climáticos y orográficos. Así y todo, éramos felices y de eso se trataba el camino ¿o no?
Cuando el día comenzaba a extinguirse y exponencialmente crecía nuestra preocupación, en un paraje olvidado, encontramos un almacén. El hambre se había apoderado de nosotros y el cansancio reclamaba reponer energías de la forma que fuese. Creo que ha sido la comida mas cara de mi vida, pero su valor fue más trascendental que lo económico. Descontando el sándwich que nos comíamos, el “almacenero” dio la mayor alegría del día: sólo faltaban unos pocos kilómetros para el fin de nuestro recorrido.
Renovados física y espiritualmente nos dispusimos a avanzar como si recién arrancásemos la travesía. Éramos un puñado de energía desbordada, nos reíamos sabiendo que, aunque insignificante universalmente, aquella había sido una proeza digna de contar en muchas reuniones familiares. Seríamos los grandes exploradores que nuestros nietos invitarían a participar en mesas redondas de colegio.
Ella, tan celosa y persistente quiso darnos la despedida a su modo; faltando doscientos metros para la van que aguardaba a aquellos gritones turistas, la lluvia de desató con furia como queriendo ser la frutilla del postre. En ese momento y con las pocas fuerzas que nos quedaban, mi hermano se giró me abrazo muy fuerte y luego dijo:

“Puede que no lleguemos a viejo juntos, pero de estos no nos olvidamos nunca más...hijo de puta”

Yo se que llegaremos a viejo juntos y que los nietos harán las delicias con nuestras historias, después de todo, amigos así no se encuentran en cualquier vía de tren.

jueves, 21 de enero de 2010

Esperando confirmación

Mediática y disciplinaria por parte de las autoridades competentes. Es un viaje de ida, en el que uno se expone a lo peor.
En breve tendré novedades, me ha ilusionado mucho y cuando me lo devuelvan lo primerísimo que hago es postearlo.

besos, abrazos, palmadas, corridas al encuentro y de nuevo abrazos.

Tibu, un chico de gira

miércoles, 6 de enero de 2010

No queda otra.

Así es, y por mas que uno se ponga nostálgico e intente volver atrás, nada de eso sucede, el tiempo corre, avanza, cambia, evoluciona. Terminamos la primer década del siglo XXI y aun muchos esperan los autos que vuelen o la teletransportación. Tránquilos que ya va a llegar, como dice el rosarino "lo importante no es llegar, lo importante es el camino".
También lo bueno muchas veces no es el camino en si, sino los caminantes que uno se va encontrando. En el recorrido muchos son las caras que me he cruzado, algunas muy buenas, otras excelentes y hay quienes no han sido benefactores de la causa, pero a todos les he (hemos, contando al hermanito/wingmate) respondido con la mas grande de mis (nuestras) sonrisas.
Aquí está un pequeño recuerdo de aquellos con los que estoy compartiendo el camino en este momento. Incluye mis primeros pasos en la edición de videos y un pequeño saludo final, espero les agrade...

Tibu, un chico del nuevo decenio




pd: sean benévolos con mi ópera prima, acepto sugerencias...