Luego de haber llegado un lunes a la noche y que OBVIAMENTE estaba lloviendo, nuestra querida amiga Lisa nos esperaba en el aeropuerto con su padre. Nos subimos al auto que tenia: EL VOLANTE A LA DEREEEEEEEECHA!!!! y nos llevaron a un pequeño pueblo que se llama Carlow a 88km de Dublin. Ahí hicimos vida de familia, cortamos el pasto, comimos sano, nos bañamos y hasta lavamos ropa. Unas pintas muy irlandesas en un bar muuuy de pueblo con unos partidos de pool en los que perdimos muuy feo y a casa...esa fue la primer noche jejeje.
Pero el destino era Dublin, y aunque estábamos muy cómodos, demasiado quizás, había que empezar a hacer vida de en serio.
Dublin ha sido nuestro hogar la ultima semana y la búsqueda laboral esta a full. Estamos a punto de comprarnos un traje verde y empezar a ponernos en la esquina a cobrar para que la gente se saque fotos con los enanos buena suerte.
Ya los mantendremos al tanto de nuestra vida Celta.
Abrazos de osos cariñosos a todos.
Los chicos de gira
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